Los
humanos somos apasionados, cada uno por sus propias cosas, una de esas cosas
por las cuales muchos se apasionan es la defensa de la fauna animal, eso no
está mal, por el contrario es una actitud loable, muchos se centran
exclusivamente en los animales domésticos. Los amantes de los perros, son muy
abnegados y pueden llegar a las lágrimas si ven un cachorro solo en la vereda,
pero probablemente no les mueva un pelo ver en la misma situación a un niño.
Cuanta
capacidad de amar a un ser desprotegido y a la vez cuanta capacidad de ignora
el bien a los suyos, he leÃdo recomendaciones a simple vista altruistas, dejen
comida y agua para los perros callejeros que no la tienen, que hermoso, ahÃ
están estas gentes dando de comer y beber a los perros callejeros, claro, en la
vereda, donde se juntan se pelean, ladran a los que pasan, atacan a los vecinos
incluso molestan a aquellos que tanto aman a un perro que conviven en su hogar
con él.
Me ha tocado
curar a mi perro, de un ataque de un perro
callejero a través de una reja, aquella altruista persona que deja
comida para estos perros vagabundos jamás se dio por aludida. Si tanto aman a
los perros callejeros, colaboren para que dejen de serlo, no lo fomenten,
bandas de perros callejeros son un peligro para el vecindario, niños
aterrorizados, excrementos regados por todas partes, son un riesgo para la
salud de la población, pero claro, usted tranquilo, dejo agua y comida para
seguir fomentando la desidia general y complicando las cosas. Piense antes de
hacer, no cuesta nada.
No
todos los perros son tiernos cachorros.



